Entidades regresivas se alimentan de tu miedo y tu ignorancia. –
Siempre hemos pensado que estábamos situados en lo más alto de la cadena alimenticia, que éramos la especie superior en este planeta y con esos aires de grandeza nos hemos movido por el mundo durante gran parte de la historia.
Hemos mirado con desprecio y superioridad al resto de especies que habita la naturaleza, pasando por nuestros fogones a casi la totalidad de las mismas, pero hay de nosotros cuando nos percatemos que no solo no estamos en lo más alto de dicha pirámide, si no que seguramente, tendremos que bajar un par de peldaños.
Todos los dioses que han tenido los distintos pueblos a lo largo de la historia, han exigido como parte indispensable de su adoración e intercambio de conocimientos, un ritual de carne y sangre, acompañado de ceremonias en las que las carnicerías y las mas horrendas torturas se llevaban a cabo sobre animales, niños (primogénitos en muchos casos) mujeres (por lo general vírgenes) y hombres (guerreros, iniciados o cualquier tipo de elegido a su gusto) en los que un sacerdote elegido por estas entidades, aplicaba los mandatos “divinos” para goce y satisfacción de estos.
Hay tres formas básicas de alimentarse de nosotros o mejor, como formar parte de su alimento, dejar claro desde el principio, que estas entidades no son humanas, todas tienen cuerpo físico y en su dieta los humanos formamos un elemento más en el menú.
Programa realizado sobre el trabajo desarrollado por:
Autor: Rubén Torres Sierra – Madrid – España
Web: La Cosecha de Almas